jueves, 24 de junio de 2010

el abrazo


objeto
almohadas sonoras
habla ella...habla el...

domingo, 20 de junio de 2010

almohaditas


almohaditas escritas
45 cm. x 25 cm.

miércoles, 23 de diciembre de 2009

Todas las cartas de amor...

Todas las cartas de amor son
ridículas.
No serían cartas de amor si no fuesen
ridículas.

También escribí en mi tiempo cartas de amor,
como las demás,
ridículas.

Las cartas de amor, si hay amor,
tienen que ser
ridículas.

Pero, al fin y al cabo,
sólo las criaturas que nunca escribieron
cartas de amor
sí que son
ridículas.

Quién me diera en el tiempo en que escribía
sin darme cuenta
cartas de amor
ridículas.

La verdad es que hoy
mis recuerdos
de esas cartas de amor
sí que son
ridículos.

(Todas las palabras esdrújulas,
como los sentimientos esdrújulos,
son naturalmente
ridículas).

Fernando Pessoa

viernes, 11 de diciembre de 2009




domingo, 6 de diciembre de 2009

cartas que se leen con el cuerpo



Foto Bea Fresno

domingo, 29 de noviembre de 2009

Foto Bea Fresno

sábado, 21 de noviembre de 2009

Carta IV

Vení, quiero ponerte todos mis besos.

Quiero besar la única boca que quiero.
Te besaré una y otra vez por todas partes.

Quiero darte largos y sostenidos besos en
tu boca, en tu cuello, en tu pecho y más
abajo, más abajo, más...
Se me calienta la sangre al sentirte cerca.
Todo se vuelve vértigo, cierro los ojos, los abro
y estamos aquí y ya nada importa.
Te miro y veo mi vida toda.
¿Acaso hay placer mayor que el perderse
entre las sábanas con vos?
Vení, falta mucho para que amanezca.

Carta V

Amor, te amo. Te amo porque te amo.

Te amo con todo y sobretodo te amo. Te amo tanto como puedo. Te amo con todo
lo que soy.

Te amo total y completamente. Te amo hasta el fondo, hasta el estremecimiento,
te amo hasta el límite y más allá del límite también. Te amo todavía más hondo, todavía más lejos. Te amo con locura.
Te amo con cordura. Te amo con los ojos cerrados y con los ojos abiertos te amo más. Te amo y no sé hacer otra cosa
que amarte. Te amo hoy y desde siempre
y te amaré mañana y hasta
el fin de los tiempos y el día siguiente, además, te amaré.


Foto Julia Edo

Carta VI


Foto Julia Edo

Carta VI


Foto Julia Edo

Carta VI


Foto Julia Edo

jueves, 19 de noviembre de 2009

souvenir


Foto Julia Edo

miércoles, 18 de noviembre de 2009

souvenir



Foto Julia Edo

martes, 17 de noviembre de 2009

entre las sábanas

Foto Bea Fresno

martes, 3 de noviembre de 2009

¿ por qué algodón egipcio, satén....?


Desde 1995 estampo las sábanas con cartas de amor. Cuando empecé no entendía mucho acerca de telas para sábanas. Lo más importante en ese momento era concretar la idea, escribir las cartas y que quedaran bien estampadas. El aspecto visual del producto llevaba toda mi atención.

Tampoco había en el mercado mucha variedad de telas para elegir.

Las primeras ediciones estaban confeccionadas en tela percal, 70% algodón, 30% poliéster. Eran muy buenas, fuertes, apenas necesitaban un poco de plancha o inclusive nada.

Con los vaivenes de la economía, las textiles empezaron a importar algodones puros de Pakistán, China, Egipto y otros países de Oriente.

A medida que fui conociendo las diferencias de calidad de los tejidos, no pude sustraerme al hechizo seductor de esos algodones, cada vez con más hilos, cada vez más aterciopelados.

Los tejidos de algodón puro son suaves, frescos porque se tejen con fibras naturales y son ecológicos.

Los hilos constituyen la densidad y la calidad de la tela.

La ”cantidad de hilos” es justamente la cantidad de hilos por pulgada cuadrada que hay en un tejido.

A mayor cantidad de hilos, mejor es la calidad de la tela.

El algodón satén es un tejido sumamente especial, tiene una textura muy suave y un brillo maravilloso.

El contacto del cuerpo con ellas es una experiencia lujuriosa.

Hoy la calidad de la tela es tan importante como los textos.

Son un poco más caras y requieren plancha… pero dormir en ellas es incomparable.

Las sábanas son un objeto de amor y de placer.

Son una fiesta para los sentidos.

domingo, 1 de noviembre de 2009

Hola Diana,
En algún momento me regalaron unas sábanas de la serie D numero 34. Estoy viviendo el proceso de una separación, ya hace 1 año y 4 meses. No se que hacer con las sábanas. Llegó el momento de desprenderme. De vaciar los recuerdos. Amé, fui amada? Sí, supongo que si. En el fondo sigo sin saber que es el amor. Se rompe el espejo y uno no sabe a quién amó realmente. Los recuerdos parecen construcciones subjetivas. Ya el otro cambió y uno cambió. Ese pasado no es más el presente. Que es lo que podría perdurar? No se porque te escribo a vos, tal vez haciéndote participe, intercambiando con tu obra de arte. Pienso lavarlas mucho a mano en alguna terraza y colgarlas que se sequen al sol. Contemplarlas y ver que sucede.
Puede ser que no tengas nada que decir... algo me impulsa a escribirte. Pero puede ser que te interese también esta parte de la obra. Lo que sucede después. Busco el símbolo escondido. Me hace reflexionar mucho todo esto.
Beso, Carmen

Hola Carmen, me encantó tu e-mail….
Quizás nadie sepa que es el amor, sobretodo cuando se va o cuando uno se separa…se siente más el dolor que el amor…si amaste y te sentiste amada…eso es maravilloso. No le pongas cabeza, es bueno guardarlo así…Amé y fui amada…sin signo de interrogación. El amor no lleva un seguro de duración, y por suerte todos cambiamos. Quizás el espejo se haya roto, pero seguro que ese espejo te sirvió para conocerte mejor, para ver tu espalda, para ver tus sombra…. Lávalas, y volvelas a usar…desapégate, son solo un objeto, disfrútalas desde otra lugar.
Un gran beso
Diana

Hola Diana,
Muchas gracias por el consejo y la devolución.
Me sirvieron mucho tus palabras acerca del amor!
Recordar que el amor no viene con el seguro de duración al lado, ni nuestras vidas es importante.
Soltar relaciones y desapegarse son caminos de mucho autoconocimiento que espero me preparen para cuando me mire en el nuevo espejo... y así conocer un amor con menos sombra y mas puro.
Guardaré las sábanas por ahora y veré como me siento usándolas... es un gran juego al fin.
Un gran beso,
Carmen.

Hola Carmen, me alegro que te hayan servido.
Te mando un gran beso
Y gracias por haber compartido esta otra parte del amor.
Diana

Diana, ¿Como estas?
Hoy pensé en vos, por eso te escribo.
En que andan tus proyectos artísticos?

Todavía no re usé las sabanas pero si se han alivianado de contenido!

Gran abrazo
Carmen

Hola Diana!
Que bueno tu aparición....
El proceso se despliega ya....me voy disponiendo para el nuevo amor...
Me hace recordar esos tiempos, esos procesos de desprendimiento cerca de febrero 2009


Las sábanas ya están vaciadas de carga emocional! Fue muy buen consejo el tuyo en su momento… tiendo a ser absoluta con las cosas.

Gran abrazo
Carmen.
Suerte con el blog
Diana: hace tres años que te compre unas maravillosas sábanas de tu colección, las disfrutamos mucho ( en casa tenemos nuevo bebe y las sabanas son testigo!!), con Fernando estamos por cumplir un nuevo aniversario en unos días y me gustaría tener unas nuevas, a que teléfono tengo que llamar para contactarnos??
Beso.
María.

Quería mandarte un mail para contarte que estamos felices durmiendo entre las hojas de esa carta de amor bellisima , que mejor manera de celebrar los años juntos con Fer !. No solo son bellas también tienen una calidad maravillosa como las de antes (de las de hace mucho tiempo atrás) .
Te mando un beso y te felicito por el blog, se puede entrar desde tu pagina?
María.
Hola Diana, como estas?

A Nati les encantaron las sabanas... estaba feliz, sorprendida, emocionada, todo junto. Se las mostró a todos los que vinieron a casa. A todo el mundo les encantó (menos a los hombres que sus mujeres les decían "cuando me vas a hacer un regalo así?!!).
Están bárbaras!
Bueno... ella feliz, yo feliz, todos felices!!!.
Muchísimas gracias.
Te mando un beso grande!
Mariano

viernes, 30 de octubre de 2009

Postal

Revista Sophia


Nikita y yo


El taller

Love Story - Pagina 12

CON NOMBRE PROPIO › CON NOMBRE PROPIO

Love Story

Diana Schufer reproduce cartas y poemas de amor en sus sábanas. Un ejemplo de arte para usar.

Por Luján Cambariere

Me quiere mucho, poquito, nada. Te amo desde el primer instante en que te vi. Vos hacés mi mundo girar. Hasta que la muerte nos separe. Para Diana Schufer, el amor es el motor que mueve el mundo y eje de todas las relaciones humanas. Desde las personales y familiares a las laborales. Porque se lo tiene, porque se lo tuvo, porque se lo desea, añora, idealiza. Y habla con conocimiento de causa, ya que antes de diseñadora y artista, ella se recibió de psicóloga, profesión que ejerce al día de hoy. En paralelo, desde hace ya diez años, estampa sábanas con cartas de amor. Piezas que recorren el mundo abrazando cuerpos con las más diversas intenciones, pero sobre todo demostrando el valor por lo artesanal y los utilitarios de artistas.

Para leer la nota completa...

La casa de Carolina Antoniadis


Revista Barzón


domingo, 11 de octubre de 2009







Fotos Julia Edo

Nueva Edición: Carta VI



juntos...muy juntos.

Todo cuanto amo está entre estas sábanas
que tu cuerpo arruga y yo respiro.

Aprieto mi corazón a tu espalda y los
latidos llegan hasta tus pies. Las bocas
se tientan en una avalancha de besos
mientras los dedos escapan y nos
redibujamos centímetro a centímetro.
Anudados nos detenemos en este instante
con la insistencia de encontrarnos acá
de nuevo.
Hay algo de mí que se queda en vos.
Hay algo tuyo que se queda conmigo.

Foto Julia Edo

jueves, 17 de septiembre de 2009

En las sábanas escritas

Estas sábanas estampadas con cartas de amor son una consecuencia de una instalación que hice en el año 1994, en el Centro Cultural Recoleta “Cartas y camas de amor”.
Eran 7 habitaciones totalmente blancas, con 7 camas de dos plazas con sus respectivas sábanas blancas. En cada una de ellas se proyectaba una carta de amor. Las habitaciones formaban una especie de laberinto que se iba recorriendo y que de alguna manera representaba diferentes maneras de relacionarse amorosamente: desde lo fugaz hasta lo eterno, desde el Te necesito hasta el Te amo profundamente. Y como las instalaciones se arman y se desarman, apareció la idea de producir estas sábanas que son objetos de arte que se pueden usar y hasta lavar sin perder sus trazos.
Durante varios años trabajé con este tema del amor y de sus palabras, porque sentí que la página de una carta amor era como el cuarto donde todos los juegos se permiten.
Porque tanto el rectángulo blanco donde una carta de amor se escribe, como el rectángulo blanco de una cama en la cual las escenas de amor se suceden, albergan todas las discursos posibles.
Porque las palabras seducen y a veces terminan desparramadas, escondidas o acariciadas entre unas sábanas.
Tanto en una carta de amor como en una cama uno se desnuda frente al otro.
Jugué con los textos, con los trazos , con las palabras proyectados en el cuerpo, con las palabras que se extendían sobre los pliegues de las sábanas.
Me gustan los signos propios, privados de un lenguaje amoroso. El deseo transportado en el trazo. La desnudez del texto.
De la unión de las cartas de amor y las camas surgieron estas sábanas.

“SABANAS CON CARTAS DE AMOR”

Sabanas con Cartas de Amor es la consecuencia de la instalación “Cartas y camas de amor” que la artista Diana Schufer realizó en el año 1994. Desplegó 7 camas y en cada una de ellas proyectó una “Carta de Amor”, representando diferentes maneras de relacionarse amorosamente: desde lo fugaz hasta lo eterno, desde el “Te necesito” hasta el “Te amo”.

Así nació la idea trasladar estas cartas a las sábanas y diseñó estos utilitarios de artista que se desprenden de su obra. Objetos de arte de uso doméstico, que se pueden usar y lavar sin perder sus trazos.
Diana es Artista visual y Psicóloga. Hace varios años trabaja en el terreno del amor y sus palabras, asociando el papel donde se escribe una carta amor al rectángulo blanco de una cama, en la cual las escenas de amor se suceden y albergan todos los discursos posibles.

Desde entonces, Diana jugó con los textos, los trazos y las palabras que se extendían sobre los pliegues de las sábanas.

Cada “Sabana con Cartas de Amor”, es una pieza de arte única, firmada y numerada.
Foto Nathalie Krag